¡Te damos la bienvenida a la guía definitiva para celíacos en Lisboa! Nuestro corazón late intensamente por nuestro país vecino, fascinados por su esplendor, tradiciones y, claro está, sabores. Por eso, queremos compartir contigo nuestras recomendaciones sobre dónde comer sin gluten en Lisboa.
Como bien sabes, a los Glutendtrotters nos tiene cautivados este rincón de Portugal. Si estás planificando tu próxima aventura, este artículo te mostrará los lugares ideales para disfrutar de platos sin gluten en esta joya atlántica.
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En nuestra última visita a la capital portuguesa y sus alrededores, nos dimos el lujo de dedicar una semana no solo a la cultura y al patrimonio, sino también a su rica gastronomía. Esperamos que la esencia que hemos recogido en esta guía te anime a explorar esta deslumbrante metrópoli.
Y si las sugerencias gastronómicas te hacen temer por ganar algún kilito, ¡no te preocupes! Lisboa, con sus sinuosas escalinatas, calles empedradas y empinados barrios, garantiza ejercicio de sobra. Así que acuérdate de meter un calzado cómodo para las sesiones de aeróbico, que equilibrarán de forma natural la temida balanza.
Nuestro top 5 de lugares para comer sin gluten en Lisboa es:
Tabla de contenidos
1. La Trattoria.
Sí, lo sabemos. Puede que pienses: ¿Un italiano en Lisboa? Pero no es cualquier italiano, es el italiano. Cuando lo descubrimos, fue imposible resistirse. Uno de los desafíos para un celíaco es encontrar pasta sin gluten de calidad, y este lugar es un acierto garantizado.
Cenamos allí la primera noche después de visitar el Miradouro de São Pedro de Alcântara. Y aunque el regreso a nuestro apartamento después de la cena fue toda una aventura, valió la pena.
La comida estaba riquísima, el servicio fue excelente y la relación calidad-precio inmejorable. Aunque las pizzas no son sin gluten, ver al chef trabajar en la cocina acristalada es un auténtico espectáculo.
2. Potato Project.
Ubicado entre la Praça do Comércio y Alfama, este peculiar establecimiento tiene como plato principal ¡las patatas fritas! Se pueden añadir una variedad de salsas y toppings al gusto. Bien para comer allí o cogerlas para llevar.
No hace falta que te diga que sí, repetimos, no pudimos resistirnos a la tentación.
Bueno, rápido, económico y con un ambiente encantador. Volveremos a caer en nuestra siguiente visita, seguro.
3. Palma Cantina.
Situado en la Rua da Palma, este restaurante es un oasis para quienes buscan opciones sin gluten y veganas.
Tras un día agitado de turismo, su terraza es el lugar perfecto para relajarse. Una comida deliciosa y un servicio amable lo convierten en una parada obligatoria.
Compartir unos tacos y por qué no, terminar con un cóctel, es el mejor final para una jornada perfecta.
4. Le bar à crêpes.
Para la última cena, elegimos esta crepería recomendada por su excelente relación calidad-precio.
Los crêpes, hechos de harina de trigo sarraceno, son una delicia. Aunque nos inclinamos por los salados, los dulces son una tentación difícil de resistir. Aitana, Paola y Manuela sucumbieron sin dudarlo para el postre.
Desde allí nos dirigimos a ver un precioso anochecer en el Miradouro dos Barros, donde se respira un ambiente tranquilo y bohemio perfecto como broche de nuestro viaje.
5. Grom.
Una gelateria italiana en Rua Garrett que sirve los helados más cremosos que hemos probado.
Aunque el precio es algo más elevado, la calidad es indiscutible.
Si estás cerca del Elevador de Santa Justa o bajando de Bairro Alto no dudes en darte un capricho con uno de sus numerosos sabores.
Todos los locales que os recomendamos en esta guía los hemos visitado personalmente pero además hay otros a los que iremos en nuestra próxima visita a Lisboa. Los que más nos han llamado la atención y que además están avalados por la APC (Associação Portuguesa de Celíacos) son los siguientes:
Rice Me
(R. Carlos Testa 18A, 1050-046 Lisboa).
Es un restaurante con una variada gama de platos que van desde cereales hasta pasta, con opciones sin gluten, sin lactosa y veganas. Su producto estrella es el arroz en cualquiera de sus versiones y técnicas. Las valoraciones que tiene en internet son muy buenas tanto por sus platos como su servicio.
Esta empresa además cuenta con una cafeteria&bakery, Rice Me Deli, en V. António Augusto de Aguiar 124 A, con excelentes opciones para el desayuno o la merienda también gluten free, sin lactosa y sin huevo.
The Food for Real
( R. dos Lusíadas 51 A, 1300-366 Lisboa).
Este pequeño y pintoresco restaurante se encuentra a la vuelta de la esquina de LX Factory.
Los que han tenido la suerte de degustar sus platos nos han puesto los dientes largos hablándonos de sus increíbles platos, sus crêpes brasileñas y sus postres de muerte. Todo hecho sin gluten y con mucho amor.
Zarzuela
(R. Bernardino Costa 21 23, 1200-052 Lisboa).
Como ya os comentamos en nuestro post sobre los 10 lugares imprescindibles de Lisboa, nos quedó pendiente la visita a esta pastelería archiconocida donde probar los Pastéis de Belém sin gluten y otras delicias.
Esta vez no conseguimos que nos cuadrara en nuestra organización del viaje pero en la siguiente visita no hay excusas.
Despensa nº6
(Av. Sacadura Cabral 6A, 1000-274 Lisboa).
Otra pastelería, un poco más alejada del centro pero con una carta que te deja boquiabierto.
Estamos deseando conocer este local ambiente acogedor y disfrutar de uno de sus famosos brunch. La crítica le deja en muy buen lugar y a nosotros se nos hace la boca agua de pensarlo.
Lisboa, con sus rincones mágicos, su atmósfera vibrante y su rica cultura, se ha ganado un lugar especial en nuestros corazones. Como celíacos, entendemos lo crucial que es encontrar lugares confiables para comer sin temor, y eso es exactamente lo que te hemos ofrecido con esta guía. Pero recuerda, Lisboa es mucho más que comida. Es la combinación perfecta de emociones, historias y experiencias únicas que aguardan a ser descubiertas.
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Si este post te ha sido de ayuda o si tienes alguna recomendación adicional que agregar a nuestra lista, ¡no dudes en dejarnos un comentario! Tu feedback es oro para nosotros y para otros Glutendtrotters que sueñan con perderse en las callejuelas lisboetas sin renunciar a la deliciosa gastronomía local. Así que, ¿a qué esperas? ¡Haz tu maleta, ponte esos zapatos cómodos y aventúrate a descubrir Lisboa sin gluten! ¡Buen provecho y buenas aventuras te esperan!
